La eternidad parece estar fuera de nuestro alcance, pero Dios nos da la oportunidad de elegir dónde la pasaremos: con Él o sin Él.
La elección se hace en esta vida, con todas sus consecuencias.
La eternidad parece estar fuera de nuestro alcance, pero Dios nos da la oportunidad de elegir dónde la pasaremos: con Él o sin Él.
La elección se hace en esta vida, con todas sus consecuencias.